Los conceptos sobre el vigor que ya hemos explicado, adquiridos durante diferentes años en experiencias y comprobaciones puntuales, los hemos querido ampliar y sistematizar en un estudio más minucioso sobre la Garnacha tinta. Este es un trabajo realizado por Jolette Steyn como trabajo final de curso del Master Vintage International que leyó en la École Supérieure d’Agriculture d’Angers (Francia), el día 12 de octubre del 2011.
Este estudio se llevó a cabo en una parcela muy heterogénea en que los años precedentes se dejaban entre 15 y 25 pulgares por cepa. En consecuencia, de la heterogeneidad en cuanto al vigor de las cepas, unas, las más vigorosas se tenían que despuntar 2 o 3 veces, en cambio los sarmientos de las más débiles no llegaban a los 50cm de longitud. Debido a esto, decidimos aplicar el concepto de la repartición del vigor.
Grupo I: cepas con vigor de 100g a 349g (vigor bajo)
Grupo II: cepas con vigor de 350g a 649g (vigor medio)
Grupo III: cepas con vigor de 650g a 999g (vigor medio-alto)
Grupo IV: cepas con vigor de més de 1000g (vigor alto)
Para ayudarnos a interpretar los resultados obtenidos, aplicamos varias relaciones para comprender la respuesta de las plantas a la poda que realizamos.
1 La Producción de madera
Después de observar las gráficas con los datos del vigor y de los sarmientos, vemos que, en los tres primeros grupos, hay una relación directa entre la disminución del número de sarmientos en la poda y el aumento del vigor durante el ciclo vegetativo.
Al inicio de la experiencia, es decir, en el invierno del 2011 la poda se hizo teniendo en cuenta el peso de los sarmientos de cada cepa, o sea, teniendo en cuenta el vigor de las cepas. Como podemos observar en el cuadro nº1, las cepas de los tres primeros grupos, en el 2010 se les dejó demasiados sarmientos para el vigor que tenían, y en el 2011 los reducimos. En cambio, en el grupo nº 4 el número de sarmientos era poco para su vigor, y en el 2011 dejamos más.
La respuesta de las cepas, al terminar el ciclo de 2011, ha sido que los tres primeros grupos aumentaron su vigor respecto del 2010 y el 4º grupo lo disminuyó, tal como vemos en el cuadro nº2.
También observamos una variación en el peso de cada sarmiento. En el cuadro 3 podemos ver que hay una relación inversamente proporcional entre la variación del número de sarmientos y la variación del peso individual.
En el primer grupo que tenia los sarmientos extremadamente cortos (en el 2010), ha aumentado el que más la longitud y el peso individual de cada sarmiento. En el segundo y tercer grupo son progresivos en el mismo sentido, y en cambio, en el 4º grupo ha disminuido el peso de cada sarmiento.
2 La Producción de uva
La producción de uva por hectárea ha sido muy desigual en los diferentes grupos, causada por la diferencia de vigor. De manera que, la producción por hectárea y la producción por cepa son directamente proporcionales al vigor. Es lógico que en las cepas que tienen el brazo más largo con más sarmientos han producido más uva. Ver cuadros 4, 5 y 2.
Pero ¡atención!
Es muy interesante constatar que, en cambio, la producción por sarmiento es prácticamente igual en todos los grupos, con muy poca diferencia. Ver cuadro nº6.
Podemos ver una recopilación de los datos de producción en la siguiente tabla:
3 La Longitud de los sarmientos
En toda la parcela, todos los sarmientos con sus racimos eran muy parecidos. Recordamos, que habían cepas en el primer grupo que tenían una longitud de brazo productivo de solo unos 40cm y un vigor de 120g y en cambio, en el 4º grupo habían cepas con brazos de 2,40m de longitud y un vigor de 3,800kg. A pesar de ello, los sarmientos y sus uvas eran muy parecidos los unos y los otros. Pero no solo parecidos sino que la pequeña diferencia entre ellos es inversamente proporcional al vigor. En el cuadro nº 8 podemos ver que las cepas con menos vigor tienen los sarmientos ligeramente más largos, y los más vigorosos tienen los sarmientos más cortos.
4 El vino
Si relacionamos ahora la producción con la superficie foliar para ver el peso de uva que produce 1 m2 de hoja, vemos en el cuadro nº 9, que hay diferencias entre los grupos, sobre todo del primero con los demás. El primer grupo ha tenido un rendimiento de 540g de uva por m2 de hoja, mientras que los demás tienen entre 700-800g.
Como que las cepas del primer grupo tenían los sarmientos más largos, esto representa más hojas y más superficie foliar, de manera que el rendimiento por m2 de hoja disminuye.
Esto también se refleja en los análisis del vino de cada grupo. Si observamos la tabla nº 10, vemos que el vino del primer grupo tiene más contenido en alcohol, polifenoles y taninos.
Cuando se realizó la degustación de los vinos, también se constató más estructura en el vino del primer grupo, muy parecidos fueron los del segundo y tercer grupo y ligeramente menos cuerpo tenía el del cuarto grupo.
Por el momento podemos decir que:
A pesar de todo, estos resultados nos invitan a preguntarnos si de una manera general:
¿Cuando a una cepa le dejamos menos sarmientos de los que tenía, reacciona aumentando su vigor?
Y a la inversa, ¿cuando a una cepa le dejamos más sarmientos de los que tenía, reacciona disminuyendo su vigor?
¿Y cómo afecta esto a la calidad de la uva, que en definitiva es lo que nos interesa?
Recomendamos mirar el Powerpoint 2ª parte donde se puede ver mejor esta experiencia.
Josep Lluís Pérez y Montse Ovejero